El gran problema que tenemos sigue siendo ,como decía Darwin, la ADAPTACIÓN.
Todo puede cambiar en unos segundos y nuestra capacidad, conciencia, serenidad y conocimientos nos pueden salvar o perder.
Nada perdura eternamente en ningún campo de la vida y lo que hoy es muy claro y evidente en pocos segundos puede convertirse en turbio e incomprensible.
Si, como decía Darwin, solo persisten las especies que mejor se adaptan a los cambios, hoy más que nunca nos sucede en la especie humana.
Cambios económicos, sociales, culturales e incluso de valores. Y si las empresas quieren sobrevivir, tienen, no solo que aceptar estos cambios, sino saber valorarlos para nadar en aguas turbulentas y salir a flote. Ya sabes, en unos segundos, todo puede cambiar y de tu reacción ante los cambios depende tu futuro y el de tu empresa.
El homo-Ciborgs, lo tenemos cerca. Hablar y trabajar con compañeros robots, seguir sus órdenes.
Hemos dejado de ser libres para ser transparentes, flexibles y obedientes a la tecnología.
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