Cuidado con las bromas o las cosas que hacemos para hacer sonreír. ..a veces salimos llorando....
Como en las bodas la novia tiene la costumbre de ponerse de espaldas al público y lanzar el ramo de flores y dicen que aquella que lo alcanza....se casa pronto. Pues bien, un gracioso hizo lo mismo en un entierro tirando la corona de flores del muerto.....ni que decir tiene lo mal que lo pasaron los asistentes al entierro.
O la vez que curè de mastitis unas vacas de leche y el dueño no quería pagarme ni los medicamentos. ..un día acudí a la granja cuando estaba rodeado de clientas con sus cántaros para comprarle leche y desde lejos le llamé por su nombre y le pregunté si las vacas enfermas ya se habían curado. ...pronto se acercó y me pagó.
No volví más.
Hay momentos en la vida que nos sale del alma...como a los mariachis, hacer alguna gracia y no siempre nos sale bien con el resultado esperado.
Piensa un poco antes en las consecuencias.
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