Aunque parece una paradoja, la solución a cualquier problema empieza por hacer buenas preguntas.
Se dice que un problema bien planteado tiene ya media solución.
Primero es comprender bien el problema con las clásicas : "Qué, cómo, porqué, para qué y cuanto."
Cuantas más preguntas relacionadas con el problema, tendremos mayor comprensión del mismo y la solución saldrá mejor.
Se dice que el mejor periodista es el que se hace las preguntas más difíciles y raras.
Improvisar no es bueno y es por eso que hay que tener siempre las preguntas pertinentes para comprender mejor cada situación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario y procura no ser ofensivo conmigo, solo intento aportar mi granito de arena, estoy abierto a diferentes opiniones y sugerencias, muchas gracias.