Ante la incertidumbre que vamos
a vivir en el año 2018 ,se requiere
serenidad.
Ser proactivos.
Aunque los cambios son contínuos y
totalmente imprevistos, la tranquilidad
es necesaria.
La precipitación de las respuestas nos
pueden llevar a cometer grandes errores.
La serenidad, la tranquilidad para recibir
los acontecimientos no se improvisa, se
adquiere con entrenamiento, con esfuerzo
anterior y sacrificio.
A esta actitud le llamamos, proactivos, estar
preparados para dar la respuesta más adecuada
ante cualquier acontecimiento.
A nivel empresarial , es tener además de la Hoja
de Ruta, con los Objetivos claros, un Plan B.
A nivel personal es:
"No poner todos los huevos en la misma canasta."
Al igual que las empresas, diversificar el riesgo.
Tener una segunda oportunidad de triunfo
prevista para el caso de fallo en la primera.
Lo peor es actuar improvisando, sin tener
seguridad en la respuesta y menos en los
resultados.
Empieza ya a prepararte, para andar por
un camino totalmente incierto, imprevisto
y que te exige respuestas rápidas.
Para triunfar en este 2018, hay que tener, fe en uno
mismo, espíritu de lucha, objetivo claro de lo que se
pretende conseguir y previsión de riesgos.
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